En que era el ángel que custodiaba su amor,
Ahora no soy mas que la desgastada silueta,
De una gárgola que defiende un cementerio de
Sueños sin realizar.
Sus ojos mortales son, destruyen lo que ven,
Y sus dulces manos pueden volver a traer
A la vida al occiso sin esperanza,
Ella da alas a quien necesita volar,
Su sonrisa alza muros contra el dolor,
Construyes puentes para cruzar,
El frió de la desesperanza que ahí debajo de mi.
Detiene el tiempo con su caminar,
Levanta los cadáveres con su paso al andar,
Trae el verde al bosque que de negro vistió,
Revierte el cauce del rió,
Llena el abismo con un trozo de su amor.
Y es que no la puedo olvidar,
Sus dulces besos, sus pasos y su hablar,
Y es que no la puedo olvidar,
En sus brazos una vez vi la eternidad.
Dolorosas heridas me cubren,
Señales de su olvido,
Lacerado esta el corazón,
Que alguna vez por ti todo lo entrego,
Yace desangrado en un rincón desde que
Decidiste prescindir de el.
Cabalgas en un corcel que nunca podre alcanzar,
Negro como la noche y mi corazón,
Tiende un lazo en mi cuello y se sienta a esperar,
Que salte por mi mismo a ese vacío infernal, de la soledad.
Y en ese abismo me pongo a pensar,
¿vale la pena sufrir por un amor que no sucederá?,
Es solo una ilusión, una quimera de maldad.
Que con sus garras me quiere destrozar,
De mi dolor ella se quiere alimentar...me quiere matar
Y nada que la olvido aunque veo el tiempo pasar,
El tiempo no cura esta herida de amor,
Siento las lágrimas mi cara surcar,
Su indiferencia me va a terminar por matar,
y aunque el tiempo pase...nunca la voy a olvidar.
"Y Nada Que La Olvido"
No hay comentarios:
Publicar un comentario