martes, 9 de diciembre de 2008

Niebla de Ángel

Desventurado me encuentro entre un velo de sombras,
Un velo que ansió descorrer, nubes espesas,
¿Que hay mas allá del deseo? solo una intención humana
De rara natura que no puedo explicar, esas alas que aparecen
Cuando todo das por vencido parecen mover hoy estos pies.

Niebla de Ángel en mis ojos, lágrimas brotan de los ojos
Que contemplaban su rostro con desdén, sin conocer su ausencia
Se regocijaron de su imagen, ahora la falta de tacto continuo y sereno
En mascaras de caricias me han presentado el dolor.

Ahora vuelo entre cuerpos ubicando su cara en las cabezas de otras,
Surco esos vacíos vientres carentes de vida para mi
En busca de algo que perdí hace mucho y que no logro
Hallar entre voces extrañas que asemejan familiaridad.

Trato de engañar mi corazón embriagando mi mente con
Elixires que roban mi alma y mis besos, empieza a corroer mis
Arterias, suben por mi Aorta y se distribuye en mi, matándome
Lentamente.

No puedo ver mas halla de mi mismo y de mis mentiras,
Mentiras que alze bajo las ruinas de un templo de verdades,
Verdades de las cuales hoy dudo y siento mis entrañas
Revolverse bajo la idea de que no sean ciertas.

Como hace falta la lenta danza y la rutina diaria del teatro
De esa vida pasada, escenario vivo de fuego y pasión hoy
Desamparado entre el frió y la cruda realidad, oxidado sus
Pilares de una putrefacta ansia del pasado.

Melancolía que desemboca en locura, que se rige como fiebre en
Mi encéfalo y me enferma hasta los dedos, y termina embriagando
Mi mente en ese ciclo vicioso de retroalimentación infeliz y de la
Cual me estoy hastiando sin poder dejarla.

Locura de luna llena que con el primer rayo de luz de la Madre de Plata
Me enerva y me dan loco poder de destrucción interna, y sin piedad
Libera al Alter Ego y me libera del antifaz que pesa como cruz.

Ahora que no puedo perder mas y que me han quitado hasta
Lo que no tenia, ahora que probé de esos néctares lujuriosos y que
Ya no hay nada que me ate a tu ente físico, me cubriré de esta Niebla de Ángel y sucumbiré ante El penoso acto de existir sin ti.


"Niebla de Ángel"

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